1 con vos:
Tengo un disparo atravesado
sobre el agujero de mí pájaro
que se derrite en la isla.
En el puente,
que dilata al mundo.
En mí mente
están los días junto al tren.
La mejor hora de regresar,
ese junto al invierno
cómo el soñado llorar.
A la mañana todos van
y nosotros volvemos
para desaparecernos en tu mano
de sangre.
Pondría unas silabas
en tus ojos.
Seguirte por esos pasillos
que como un dios
nos da los mejores días
Para alcanzar al sueño
que hacemos en nuestro goce.
No gritare en el silencio,
y no me quites mi mirar.
Junto a vos estoy sepultando todo;
somos solo eso que
nuestros vidrios rotos,
están llenando de bendición
nuestra almas en pena.
Solo quiero que esquivemos a la muerte,
haciendo el amor otra vez.
Solo nosotros sabemos
como vimos los ovnis desaparecer en la oscuridad.
2 algunos:
Salte las rejas
que ponen a este metro
cerca del campo de concentracion.
Veo como ese galpon
prende fuego a sus seres
pero solo las palomas son las que disfrutan
el calor del llanto.
Esta arriesgando todo,
mientras cae
con sangre sobre las rocas
de su frente.
Es un avivaz salvaje
que pierde la cordura;
y se recompone sobre
su sed de vida.
Como un arrebato
se besa en tus ojos
como si perdiera
las rafagas
de su mente
que lo lleva a la corniza.
Perdio la mente
y arriesgo todo
por ese trazo
que baila sobre sus piernas.
Esta muriendo
pero se entrega toda a su ama.
Adios:
Todo lo que hice se lo trago el mar,
y contra la oscuridad,
me raspa la nuca;
y mis nudillos liberan el rojo,
lo deja en la calle,
que estan los sahuesos.
Ahora ellos muerden,
y no dejan espacios
para fabricar nuestras nieves.
Fantasmas,
caminan por aca;
ninguno para ser de mi luz.
Una estrella negra,
colisiona con mi miedo.
Tengo miedo,
de mi muerte.
Aun oigo las voces,
y las libertades,
que guarde en una lata,
cuando lo haciamos en el baño.
Me fui,
y me encontre en el dolor;
a todos los que hice daño,
ahora son una lagrima agria,
que desprende el azul
mas doloroso de mi pulmon.
Los oigo hablar,
gritar.
Solo hay una lluvia de cometas.
Estoy solo.
Nadie sabe donde estoy,
mi camino es tan raro como mi alma.
Tengo un disparo atravesado
sobre el agujero de mí pájaro
que se derrite en la isla.
En el puente,
que dilata al mundo.
En mí mente
están los días junto al tren.
La mejor hora de regresar,
ese junto al invierno
cómo el soñado llorar.
A la mañana todos van
y nosotros volvemos
para desaparecernos en tu mano
de sangre.
Pondría unas silabas
en tus ojos.
Seguirte por esos pasillos
que como un dios
nos da los mejores días
Para alcanzar al sueño
que hacemos en nuestro goce.
No gritare en el silencio,
y no me quites mi mirar.
Junto a vos estoy sepultando todo;
somos solo eso que
nuestros vidrios rotos,
están llenando de bendición
nuestra almas en pena.
Solo quiero que esquivemos a la muerte,
haciendo el amor otra vez.
Solo nosotros sabemos
como vimos los ovnis desaparecer en la oscuridad.
2 algunos:
Salte las rejas
que ponen a este metro
cerca del campo de concentracion.
Veo como ese galpon
prende fuego a sus seres
pero solo las palomas son las que disfrutan
el calor del llanto.
Esta arriesgando todo,
mientras cae
con sangre sobre las rocas
de su frente.
Es un avivaz salvaje
que pierde la cordura;
y se recompone sobre
su sed de vida.
Como un arrebato
se besa en tus ojos
como si perdiera
las rafagas
de su mente
que lo lleva a la corniza.
Perdio la mente
y arriesgo todo
por ese trazo
que baila sobre sus piernas.
Esta muriendo
pero se entrega toda a su ama.
Adios:
Todo lo que hice se lo trago el mar,
y contra la oscuridad,
me raspa la nuca;
y mis nudillos liberan el rojo,
lo deja en la calle,
que estan los sahuesos.
Ahora ellos muerden,
y no dejan espacios
para fabricar nuestras nieves.
Fantasmas,
caminan por aca;
ninguno para ser de mi luz.
Una estrella negra,
colisiona con mi miedo.
Tengo miedo,
de mi muerte.
Aun oigo las voces,
y las libertades,
que guarde en una lata,
cuando lo haciamos en el baño.
Me fui,
y me encontre en el dolor;
a todos los que hice daño,
ahora son una lagrima agria,
que desprende el azul
mas doloroso de mi pulmon.
Los oigo hablar,
gritar.
Solo hay una lluvia de cometas.
Estoy solo.
Nadie sabe donde estoy,
mi camino es tan raro como mi alma.
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